Cuando pensamos en dulces mexicanos tradicionales, los buñuelos ocupan un lugar especial. Este delicioso postre, crujiente y cubierto de azúcar y canela, es un clásico en celebraciones y reuniones familiares. Hoy quiero compartir contigo cómo prepararlos en casa, recreando esa sensación de calidez y tradición que evocan con cada mordida.
Ingredientes (para 10-12 buñuelos):
2 tazas de harina de trigo
1 cucharadita de polvo para hornear
1/4 cucharadita de sal
2 cucharadas de azúcar
1 huevo
1/4 taza de leche
1/4 taza de agua
2 cucharadas de mantequilla derretida
Aceite vegetal para freír
Azúcar y canela en polvo para espolvorear
Utensilios:
Rodillo
Sartén profundo o freidora
Papel absorbente
Un plato grande para mezclar
Paso a paso:
Preparar la masa: En un bowl grande, mezcla la harina, el polvo para hornear, la sal y el azúcar. Forma un volcán en el centro y agrega el huevo, la leche, el agua y la mantequilla derretida. Mezcla bien hasta obtener una masa suave y homogénea.
Amasar y reposar: Amasa la mezcla sobre una superficie ligeramente enharinada durante 5 minutos, hasta que esté elástica. Cubre la masa con un paño limpio y déjala reposar por 30 minutos.
Formar los buñuelos: Divide la masa en porciones pequeñas, del tamaño de una pelota de golf. Con un rodillo, extiende cada porción hasta formar discos delgados.
Freír los buñuelos: Calienta el aceite en un sartén profundo o freidora a fuego medio-alto. Fríe los discos uno por uno, dándoles vuelta hasta que estén dorados y crujientes. Coloca los buñuelos en papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Espolvorear azúcar y canela: Mezcla azúcar y canela en un recipiente aparte. Mientras los buñuelos aún están calientes, espolvoréalos con esta mezcla para que queden bien cubiertos.
Tips para lograr los mejores buñuelos:
Si quieres un toque más auténtico, agrega una pizca de anís molido a la masa.
Asegúrate de que el aceite esté a la temperatura adecuada para que los buñuelos queden crujientes y no absorban demasiado aceite.
Sirve los buñuelos con miel, piloncillo derretido o incluso con una bola de helado para un giro moderno.
Un poco de historia de los buñuelos:
Los buñuelos tienen un origen que se remonta a España, pero en México han adoptado un carácter único, convirtiéndose en un símbolo de celebración, especialmente durante las fiestas decembrinas. Su preparación en casa es un ritual que reúne a las familias y mantiene viva la tradición.
Espero que disfrutes preparando estos deliciosos buñuelos mexicanos. Son el postre perfecto para compartir, regalar o simplemente disfrutar con un café o chocolate caliente. ¡No olvides contarme cómo te quedaron en los comentarios o compartir tus fotos en redes sociales! 😊
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